CIRUGÍAS MÚLTIPLES: Se ha vuelto una práctica habitual, pero puede conllevar a grandes riesgos para los pacientes.
Una mayor inflamación, una cicatriz más severa y un periodo de reposo más prolongado , todo esto puede ocasionar una cirugía múltiple.
Una práctica común en los últimos tiempos dentro de la especialidad de cirugía plástica, son las cirugías múltiples. Realizarse dos o hasta tres intervenciones quirúrgicas al mismo tiempo se ha vuelto habitual, tanto que en países como Estados Unidos un 45% de las cirugías plásticas son cirugías múltiples. Sin embargo, cabe la pena preguntarse qué tan recomendables es esta modalidad de cirugías.
Lo primero que debes saber es que no todas las cirugías son compatibles para realizarse a la vez. Por ejemplo, se recomienda que sean cirugías menores, las realizadas en simultáneo, o una cirugía mayor con una menor, pero de ninguna forma dos cirugías mayores a la vez. En este caso, las cirugías que pueden combinarse son, por ejemplo, un afinamiento de rostro con un aumento de mamas o esta última junto a una cirugía estética de abdomen.
El enemigo de la cicatrización: la inflamación
Uno de los motivos por los cuales diversos especialistas no aconsejamos las cirugías múltiples es por la intensidad del proceso inflamatorio. Es importante saber, que a mayor inflamación, mayor será la cicatriz y, de igual forma, mientras menor sea la inflamación, menor será la cicatriz; por lo que inevitablemente una cirugía múltiple hará que la cicatrización del paciente sea más lenta.
Una recuperación más larga
Además, someterse a una cirugía múltiple implica que el paciente tenga un proceso más largo de recuperación, lo que implica mayores prohibiciones. Por lo general, quienes se someten a una cirugía buscan estar lo más rápido posible de regreso al trabajo, pero con una cirugía múltiple este proceso se retarda mucho más.
Además, una cirugía múltiple siempre conlleva mayor riesgo que una cirugía normal, pues la anestesia se prolonga por más tiempo.
Dejar una contestacion